Se caracterizan por una alteración persistente en la alimentación o en el comportamiento relacionado con ello. Es una variación en el consumo o en la absorción de los alimentos que causa un deterioro significativo de la salud física, psicológica o del funcionamiento psicosocial (DSM-V).
Se puede observar que hay una ansiedad significativa asociada a la ingesta de comida. Existe una incongruencia entre la percepción de la propia imagen y la imagen real o una incapacidad de controlar los impulsos con la comida. La comida se vuelve más que un simple alimento, se convierte en una relación patológica sea por rechazo o por consumo, que lleva a producir efectos adversos sobre la personalidad con un conjunto de procedimientos externos.
El tratamiento conlleva una acción multidisciplinaria continua ya que el trastorno de la conducta alimentaria puede llevar consigo otras patologías del carácter relacionadas. Hay un resultado positivo al buscar tratamiento donde es posible controlar y mantener una relación estable con los alimentos. Si ve que necesita un proveedor de atención de salud mental, no lo dude, puede salvarle la vida o la de la persona que ama.
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Si se está preguntando cuál es el mejor tratamiento para usted, contamos con un equipo de profesionales certificados que pueden evaluar y guiarlo hacia la terapia que más le puede ayudar.
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